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¿Alguna vez has tenido sangre en el oído? Esto puede ser una experiencia aterradora, sobre todo si va acompañada de dolor. Tener un sangrado en el oído por lo general es causa de preocupación, pero esto no significa en todos los casos que tengamos algo grave.
Hoy en día, existen diversos motivos por los que puede ocurrir un sangrado de oído, de los cuales algunas son dolorosas y otras no. A continuación, explicaremos las posibles causas, síntomas, diagnóstico y tratamientos que se pueden utilizar para tratar esta afección.
¿Qué es y por qué sale sangre en el oído?
La sangre en el oído es una condición en la que la sangre se libera desde el oído interno o medio hacia el canal auditivo. El término médico para esta afección es “otorrea” y puede producirse por diversos motivos e ir acompañada de dolor o no.
Si se detecta sangre en el oído, es importante buscar atención médica de inmediato para que un especialista determine lo que la está causando. Saber cuál es la causa de la condición es el primer paso para determinar el tratamiento adecuado para el caso.
Causas de la sangre en el oído
La sangre en el oído puede estar causada por diversos factores tanto internos como externos. Aunque la lista de factores que la pueden ocasionar es muy extensa, las causas más comunes son lesiones, infecciones, hipertensión arterial, cambios de altitud, etc.
Lesiones
Las lesiones son la causa más frecuente de la presencia de sangre en el oído. La lesión puede producirse por una fuerza externa, como un traumatismo, o por una fuerza interna, como la rotura de un vaso sanguíneo. Estas lesiones pueden provocar hemorragias en el oído interno, el oído medio y/o el tímpano y por lo general están acompañadas por un dolor agudo.
Infecciones
Otra de las causas más comunes por las que sale sangre en el oído son las infecciones. La infección del oído interno, el oído medio y/o el tímpano puede provocar hemorragias y pueden ser originadas por virus, bacterias u hongos. Las infecciones más comunes que pueden causar sangre en el oído incluyen la otitis media, la otitis externa y la mastoiditis.
Hipertensión arterial
En ocasiones, la hipertensión arterial puede causar sangre en el oído en los adultos, debido a la ruptura de los pequeños vasos del oído interno. Estas lesiones también pueden producirse en el oído medio, causando la hemorragia debido a las altas presiones a las que se someten los vasos sanguíneos.
Otras causas comunes
Como ya hemos dicho, existen muchos factores que pueden desencadenar un sangrado en el oído, por lo que enumerarlas todas nos tomaría mucho tiempo. Además de las ya nombradas, otras causas frecuentes son:
- La exposición a sonidos fuertes
- Cambios bruscos de altitud
- Lesiones en la cabeza
- Objetos extraños en el canal auditivo
- Tumores, etc.
Síntomas de la sangre en el oído
Obviamente, el principal síntoma de esta patología es la presencia de sangre en el canal auditivo, pero puede incluir pérdida de audición, mareos y/o dolor. La pérdida de audición puede deberse a que la sangre obstruya el conducto auditivo, impidiendo que el sonido llegue al oído interno.
Por otra parte, los mareos pueden deberse a la obstrucción de los canales semicirculares del oído interno por la sangre, alterando el sistema del equilibrio. Dependiendo de la causa original, la presencia de sangre en el oído puede estar acompañada de dolor, sobre todo si es producida por una lesión.
Tratamiento de la sangre en el oído
El tratamiento utilizado para controlar un sangrado en el oído depende directamente de la causa subyacente. Si el sangrado es causado por lesiones o infecciones, puede tratarse con antibióticos, medicamentos tópicos o, en casos más graves, una intervención quirúrgica.
En el caso de que la condición sea causada por un tumor o cáncer, por lo general necesita ser tratada con cirugía, radioterapia o quimioterapia. Si el sangrado fue producido por un aumento de la presión arterial, basta con tratar la hipertensión para que este desaparezca por completo.
Prevención de la sangre en el oído
La mejor manera de prevenir la sangre en el oído es evitar las actividades que puedan causar lesiones o infecciones. Estas actividades incluyen deportes de contacto, ruidos fuertes, nadar en aguas contaminadas, etc.
En el caso de una persona hipertensa, una dieta sana y hacer ejercicio con regularidad mantendrá controlada la presión, evitando que se produzca el sangrado. Recuerda que, aunque parezca aterrador, la presencia de un sangrado en el oído no siempre es indicio de una condición grave en tu sistema auditivo.
Sin embargo, si en alguna oportunidad presentas algún síntoma relacionado con esta condición, es muy importante que busques atención médica inmediatamente.
